Este tonto hormiga lleva unos días invernando en su hormiguero. Este tonto hormiga ha puesto orejas puntiagudas bajo pomos nuevos y tiradores envejecidos con la intensión de cotillear sobre los trapicheos políticos de partidos mandatarios. Pero, este torpe y cansado hormiga vagabundea por las calles palmeñas un tanto sordo y un poco mudo a causa del desierto informativo a la ciudadanía. Expectante, nervioso y un tanto inquieto a la espera del sábado once de junio. Dudoso e imaginando ese paseillo por las escalinatas consistoriales de 21 personas, donde alguna de ellas desean coronarse como emperador o emperatriz como lo hizo Napoleón por aquellos tiempos. Esperemos que éstos no vengan de tierras lejanas como vino Bonaparte con engaños y promesas desarmando más tarde a la España de primero del siglo XIX.
Mientras tanto, este hormiga camina lentamente, de un lado hacia otro, lejos de los escalones de la casa laureada, armándose de paciencia y cavilando. Preguntándose en cada pasada lo utópico que resultaría para Rajoy las palabras de kipling "si piensas que estás aventajado, lo estás. Tienes que pensar bien para elevarte. Tienes que estar seguro de ti mismo, antes de intentar ganar un premio". Y, digo utópico, porque tras escuchar la rueda de prensa que dio este señor hace unos días, y hacer que mis oídos dolieran y mi barriga riera, ante la solución que tiene éste para la crisis, me pregunto por cómo será la gestión y por ende, cuál la solución, de algunos de sus discípulo en mi pueblo. Pues por más que releo programas gaviotescos, la analogía entre lo estatal con lo municipal se hace evidente y aquella aportación de Mariano Rajoy "la mejor aportación que puedo hacer es no decir nada" golpea y aporrea el corazón de este hormiga.
1 comentario:
Por favor hormiga... Nada tiene que ver la gestión que haga el Sr. Rajoy, la Sra. Aguirre, o el Sr. GAllardón con los aficionados a la política que tenemos en la localidad. En absoluto es comparable a estos señores con lo que tenemos en el pueblo
Publicar un comentario